RECICLANDO (Back to the 80's)

Ante todo pedir perdón a los que nos seguís por estos días de silencio. No ha habido ninguna causa en especial. Podemos echar la culpa al tiempo, a los nubarrones externos e internos. Haciendo un resumen de los últimos días, diré que el viernes estuvimos en un fantástico concierto de Juan Zarppa en La Vaquería en el que Miguel, Salva y Pepo se salieron. Un concierto sin concesiones en el que desgranaron los temas de su primer disco "Desatascos y limpiezas" (podeis escucharlo en Spotify, aunque también podeis encontrarlo en Fnac y en sus conciertos) y algunos de su inminente segundo trabajo. Sonaron tremendos, en formato power trio, con contundencia y seguridad y los muchos que allí estábamos lo pasamos en grande, entre amigos y viendo a amigos. Yo tuve el honor de poder compartir voz en "Fotos", un tema de su nuevo disco que a día de hoy es mi favorito, aunque me da que alguno más me va a hacer cosquillas en el estómago. Antecediento a Juan Zarppa pudimos ver a Manolo Breis, un cantautor de maneras rock que, junto a Fernando Rubio a la guitarra y la armónica (también se marcaría un tema con Juan Zarppa), presentó en acústico sus temas calentando el ambiente para lo que vendría despés. Concierto redondo en el que tanto músicos como público quedaron satisfechos. Tras el viernes llegó un fin de semana de cueva y desaparición. Necesitaba desconexión y eso fue lo que tuve. LLega el lunes, en principio hay que cantar por la tarde. Un paseo matutino por el mercadillo de Salou, una comida con la famili y me voy a reposar antes de ir al estudio. En el camino tengo un recuerdo de mi adolescencia que me acompaña en los últimos días. Mi "chupa" de cuero, una cruzada clásica "jevi" de las de toda la vida, pero de piel blanca... ya sabeis, soy "asín". Decido echar un vistazo en el trastero de mis padres y ahí aparece, a la primera, no se hace de rogar. Me la pruebo y me sigue quedando como un guante. Back to the 80´s. Dicen que las modas son cíclicas, hoy habría más de un moderno que pagaría lo que le pidieran por una "chupa" así, rozada, gastada, envejecida, pero esta es de verdad. Que viva el reciclaje. Pronto la conocereis. Me da que va a vivir una segunda juventud este invierno. Finalmente no tengo que ir al estudio. Toca edición. La palabra maldita de este disco. Me quedo en casa y devoro mi nueva serie "fetiche": "Sons of anarchy". Echadle un ojo. Todos los ingredientes del "Walk on the wild side", puro camino por el borde del abismo, rock´n´roll, motos y chanchullos por doquier. No apta para antiyankis, pero pura adrenalina. Llega el martes y, esta vez si, toca ponerse de nuevo el mono de faena y ponerse a cantar. Por la mañana nos ponemos con "Hasta el infinito y más allá" y "Pirómanos", creo que las resuelvo con buen resultado, y digo creo porque llega un momento en que uno ya duda de todo. Toca comer en Can Xiulet, un sitio que ha sido nuestro descubrimiento gastronómico de la grabación. Menú casero a casi cualquier hora, buen trato y sensación de comer en casa de mamá. Tras la comida, cambio de fogones, me voy a La Cocina de Juan Zarppa (el estudio de Miguel) a seguir con más voces. Entre charlas nos comemos un par de temas más. El tiempo apremia y tenemos que diversificar la grabación para avanzar y ver el final. Mientras, en Radish records, Quique está grabando las últimas guitarras que le faltan y Ramonet ejerce funciones de producción. A eso de las 12 de la noche me paso por el estudio y Quique está finiquitanto "Flor de bar", parece que hemos terminado con sus guitarras. Nos abrazamos. Dani me echa una mano con unas correcciones en otra de las sorpresas que, sobre la marcha, se nos ha ocurrido para la grabación. Lo anunciaremos pronto. A mi me hace ilusión y creo que el resultado será muy bonito. Termina la jornada. Otro día duro. Muchas horas, pero bueno, al menos hoy sentimos que hemos dado un buen empujón. Toca descanso y mañana seguimos. Poco a poco. Espero que alguno de los que leeis esto, a estas horas, seais un poco más ricos... (Malacabeza busca sponsors y patrocinadores ;)). Suerte y felicidad. Joel Reyes